Cuatro victorias y cuatro derrotas para los equipos del BAM durante el pasado fin de semana

El viernes por la tarde comenzaron las ligas alevines, debutando con victoria el alevín masculino a domicilio frente al ADC por 28-35 y el alevín femenino A, en casa contra el AlQázeres por 37-26. Peor suerte corrieron las chicas del femenino B, que cayeron en casa contra el Sagrado en un partido muy igualado de principio a fin, 29-34

El sábado por la mañana, el equipo infantil masculino perdió en casa del ADC por 84- 33, mientras que el femenino hizo lo propio en casa por 34-65 contra el San Antonio.

Le fueron mejor las cosas al equipo cadete femenino, que sumó su segunda victoria de la temporada al vencer al Miralvalle C por 67-43, lo que las coloca en la zona media de la clasificación.

Las que no consiguen poner la primera victoria en el casillero son las chicas del junior, que sumaron una nueva derrota, esta vez frente al Plasencia, por un contundente 25 -79.

Ya por la tarde, turno para el equipo sénior femenino, que se enfrentaba a Castra Servilia, un partido a priori igualado dada la corpulencia de las cacereñas.

Comenzaron muy bien las nuestras dominando el rebote y castigando a las castrenses con rápidas transiciones en el primer cuarto. El segundo cuarto fue igualado, con muchos errores en el tiro por parte de los dos equipos.

Tras el paso por vestuarios, las malpartideñas alcanzarían la mayor renta del partido, 48-29, gracias en parte a la labor de Isa Moreno, jugadora más destacada del partido, que acabó el choque con 26 puntos, 17 rebotes y 8 tapones.

El último cuarto fue el peor de las locales, con muchas pérdidas motivadas en parte por la mejora defensiva del Castra. Pero la renta fue suficiente y consiguieron mantener la ventaja hasta el 52-39 final.

El último partido del fin de semana enfrentaba a los chicos del sénior masculino contra el San Antonio, en Cáceres. Partido para olvidar, no en vano, los malpartideños perdieron 37 balones, lo que da una idea del partido disputado. El resultado final, 61- 40, deja claro que no fue ni mucho menos el día de los jugadores malaprtideños.